Baby
Luciana Garriga
Creo que las jóvenes poetas, o una gran mayoría de ellas, han perdido (afortunadamente) el pudor en el momento de escribir sus poemas. Sobre todo, cuando éstos giran alrededor de ese gran misterio: la cópula.
Saben que toda palabra es velo, metáfora de algo, por lo tanto, no necesitan de la sublimación. El cuerpo, en todo caso, es el gran misterio, y el desafío de la palabra poética está en nombrarlo. ¿Pero cómo? Con pelos y señales. Desoyendo el pedido de ser blancas y ser puras que alguien, cada tanto, les profiere (¡Dios se los perdone!) y arremetiendo, de una buena vez y por todas, con toda la impureza del cuerpo en estado de deseo y de amor.
Así se escriben los poemas, ahora. Así las chicas escriben sus poemas, desvergonzadas. Así estos poemas de Luciana Garriga, con una mezcla de Catulo y Alfonsina Storni, de Susana Thénon y Sor Juana Inés de la Cruz… Y algo nuevo, algo completamente distinto que se está escribiendo en la actualidad.
De manera que, hombres necios que acusáis, lean estos poemas y aprendan de lo que habla una mujer cuando habla de amor. Aunque se les vuele la cabeza; no importa. Yo mismo, debo confesarlo, me escandalizo un poco y me alegro al leer estos versos procaces y líricos, sensuales y corrosivos. Vitales, siempre.
Como dijo Victoria Ocampo: El pudor es el enemigo de la literatura y de las mujeres, al mismo tiempo que proponía, en su lugar, una escritura más verdadera. Yo creo que Baby, este primer libro de Luciana Garriga, cumple ese deseo a la perfección.
Osvaldo Bossi
Detalles del libro